De verdad... ¿En qué consiste la doble limpieza facial?

Seguro escuchaste mil veces hablar de la doble limpieza y hasta capaz que la aplicás pero, ¿lo hacés correctamente? Por el contrario, podés ser de esa clase de personas que se está enterando con este posteo lo que es la doble limpieza facial.

Sea como sea, hoy nos vamos a adentrar en este bello mundo.

Las bases de la doble limpieza facial

Este tipo de limpieza se hace solo en la rutina de skincare de noche y es ideal hacerla SIEMPRE que usemos maquillaje, y al menos de 3 a 4 noches a la semana si solamente usamos protector solar.

Esto es porque la doble limpieza nos ayuda a limpiar en mayor profundidad la piel, lo que repercute positivamente en personas con pieles mixtas o grasas, que viven en lugares con mucha contaminación o si simplemente queremos conseguir una piel más equilibrada y bien preparada para recibir los tratamientos posteriores.

La doble limpieza se hace siempre primero con un limpiador de base oleosa y luego con uno de base acuosa.

Limpiador de aceite y de agua, ¿cuál es la diferencia?

El limpiador a base de aceite (que puede ser un bálsamo limpiador, un aceite limpiador facial, un bifásico inclusive) nos permite eliminar bien el maquillaje, el protector solar y el exceso de sebo, todos elementos grasos que se eliminan mejor con otro elemento oleoso.

Por su parte, el limpiador con base acuosa (generalmente geles de limpieza o espumas) remueven las impurezas de la superficie de la piel tales como el sudor, la polución y la suciedad en general.

¿Sirve el agua micelar?

La respuesta corta es no. A menos que se trate de un agua micelar bifásica (que se llama así porque tiene dos fases: una en aceite y otra en base a agua). Si es un agua micelar común, podría ser una buena opción como segundo paso de la doble limpieza.

Otra opción clásica pero que sí funciona como primer paso de la doble limpieza son las leches o cremas limpiadoras, ya que sus componentes son grasos.